El ESTRÉS!!!!!! La ANSIEDAD!!!!!! La mayoría de nosotros estamos estresados y sufrimos de ansiedad, parece ser un mal común hoy en día. La mayoría de nosotros estamos intentando hacer demasiadas cosas con muy poco tiempo y acabamos con insomnio y arrasando con las galletas a las 2 de la madrugada!
Por desgracia, estos problemas comunes no tienen una solución fácil. Muchas personas acaban tomando medicamentos como antidepresivos, pastillas para dormir y tranquilizantes, todos de los cuales son peligrosos y si no se utilizan correctamente, pueden empeorar el problema.
Existen varios remedios naturales que puedes intentar; yoga, meditación, sofrología, técnicas de relajación y, por supuesto, los alimentos. Soy creyente en el poder de la meditación y la sofrología incorpora tanto la meditación como las técnicas de relajación. Sin embargo, tienes que hacer un hueco en tu ya apretada agenda para practicar estas cosas. Si crees que no tienes tiempo para esto, piensa de nuevo. Cuantas noches acabas tirado en el sofá viendo la televisión sin sentido? Utiliza ese tiempo para practicar la técnica de relajación que decides adoptar. La otra cosa que puedes hacer es incorporar hábitos alimenticios saludables a tu vida.
Ir a la cama con el estómago lleno puede que parezca una buena idea, pero no lo es. Para una digestión óptima, el cuerpo necesita estar en una posición vertical para que así la gravedad puede ayudar al sistema digestivo a procesar la comida que hayas ingerido. Si te llenas antes de tumbarte tu sistema digestivo tiene que trabajar más y la comida tiende a quedarse estancado durante demasiado tiempo antes de ser procesado correctamente.
Piensa en qué vas a comer para cenar. La cena = la última comida del día… normalmente antes de ir a la cama. Al menos que estas a punto de salir a la discoteca más cercana y bailar toda la noche, la cena suele ser la última comida del día antes de ir a la cama. Los hidratos de carbono nos suministran con mucha energía instantánea, realmente necesitas tanta energía para ir a dormir? Intenta hacer cenas ligeras, preferiblemente de verduras. Si tienes mucha hambre, puedes añadir un poco de carne, pescado o aves, pero sería mejor comer cantidades más grandes de verduras que llenarte de proteína animal. Las sopas son una buena opción ya que el líquido caliente proporciona una sensación de estar lleno. Entonces, hay que evitar a la pasta carbonara o la pizza tamaño familiar y elige verduras a la plancha o al vapor o una sopita de verduras calentita!
También existen varios alimentos que puedes incorporar a tu dieta para luchar contra la ansiedad. Puedes tomarlos a cualquier hora del día – o la noche!